Iglesia Bíblica Torre Fuerte

En Tiempos Difíciles

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Tras el terremoto han surgido todo tipo de ayudas, diatribas y ditirambos, dislates y disparates en torno al lamentable suceso acaecido.
Todo México se ha vuelto en caos y desesperación: ayudar unos, denostar otros.

Creo que es normal, dado que el dolor nos arremete y nos hace vivir la dificultad y aflicción de la vida. Tanto para los afectados como para los que ven la destrucción y desgracia en otros.
Aun así nos hemos organizado, hemos ayudado y la unidad ha hecho que muchas manos se unan para hacer lo mejor posible. México late con fuerza.

Circulan en las redes mensajes de coraje para diputados que parecieran que únicamente están interesados en su dinero para las campañas y parecieran ajenos al dolor que desangra a nuestro país.
Pero debemos enfocar nuestro actuar y nuestro pensar en cómo podemos ayudar, en hacer algo, aunque parezca insignificante, aceptar que nuestra conciencia nos apunta en al dirección de ayuda al otro, al damnificado.

También debemos orar sin cesar. La oración de intercesión es muy importante, pus nos da la unidad para ejecutar en sincronía.
Entonces, orando y actuando.
No importa lo que otros digan, no importa lo que otros hagan, especialmente si es para denostar. Importan los corazones que quieren ayudar y los corazones lastimados por la desgracia del suceso natural inesperado.

Hoy en el TcD nos regala un consuelo y un ánimo para este tiempo, dice:
“Señor tu eres mi Dios, te exaltaré, alabaré tu nombre, porque has hecho maravillas; tus consejos son verdad y firmeza.
Porque fuiste fortaleza al pobre, fortaleza al menesteroso en su aflicción, refugio contra el turbión, sombra contra el calor, porque el ímpetu de los vientos es como turbión contra el muro.
Destruirá a la muerte para siempre; y enjugará El SEÑOR toda lágrima de todos los rostros.
Y se dirá en aquel día: He aquí , éste es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvará; este es Dios a quien hemos esperado, nos gozaremos y alegraremos en su salvación.”

Por tanto, convetámonos en fortaleza, ayuda, refugio y consuelo para aquellos que nos sea posible, ayudando de la mejor manera que podamos, en silencio, de preferencia. Allí está todo el amor de Dios.

Bendiciones.

 

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