Tam Stanley
Posted on 8 October, 2016 by René Preza G. No comments
Tam Stanley era un hombre de negocios que creía fiel y firmemente en Dios, un día decidió hacer socio de su negocio a Dios.
Dios tendría el 51% de las acciones y él tendría el 49%. Dios seria el socio mayoritario y el que tomaría las decisiones más importantes.
El abogado lo escucho y después le dijo: “Vaya usted a otra notaría, está loco”.Así recorrió algunas notarías y luego de escuchar su propuesta lo corrían y tildaban de loco.
Por fin llegó a una en donde creían firmemente en Dios y luego de escucharlo le dijeron:”Muy bien Señor Stanley, lo haremos como dice. Le ofrezco crear una fundación y todas las utilidades que se generen que vayan para la obra de Dios y de esta manera Dios será su socio. Así fue.Tam Stanley oró a Dios y le dijo: Padre, tu eres el dueño de todo, gracias por hacerme tu mayordomo, te prometo que si tu bendices tu negocio y somos prosperados, te honraré en toda forma posible que yo pueda.
Paso el tiempo y el negocio empezó a crecer. Tam repartía las utilidades conforme a lo establecido en el acta constitutiva. De pronto decidió entrar al negocio de los plásticos allá por los años 50’s y allí fue en donde el negocio creció exponencialmente y las utilidades se dispararon impresionantemente.
Tam, apoyó a través de la fundación, a la plantación de muchas iglesias y en todas ellas lo querían mucho.
Se dice que en un tiempo de alrededor de 20 años donó más de 30 mil millones de dólares, si, si, leyó bien.
Un día enfermó de cáncer y todas sus iglesias se unieron en oración por este gran hombre hasta que sanó.
En la entrada de su empresa puso un letrero que decía: Jesucristo es la respuesta.
Esta es una hermosa historia real de un hombre que decidió entregar su vida a la obra del Señor y fue grandemente recompensado.
Entreguemos nuestras vidas al Señor y honrémoslo de toda forma en que nos sea posible.
Puede ver la historia completa en YouTube con el nombre de
The Tam Stanley story. Bendiciones